El señor cuidadoso tenía miedo de volar, y vivió así toda su vida hasta que se decidió. Hizo sus maletas, beso a sus niños y dijo adiós.
Había esperado toda su maldita vida para tomar ese vuelo, y mientras el avión se estrellaba pensó “Bueno, esto no esta bien...” ¿Es irónico, no?
Es como la lluvia el día de tu boda, es un viaje gratis cuando ya has pagado todo, es el buen consejo que no supiste tomar. ¿Quién lo hubiera pensado? Pero te diría que es hasta lógico.
Es un viejo de 98 años que gano la lotería y murió al día siguiente, es la absolución de tu condena de muerte dos minutos después de que mueras ¿Es irónico, no?
La vida tiene formas graciosas de pasar inadvertida, cuando pensas que todo es correcto y todo va bien esperamos a que algo suceda, y cuando pensamos que todo va mal y explota en nuestras cara la vida tiene una forma graciosa de socorrernos.
Es como el transito pesado cuando llegas tarde, es una señal de prohibido fumar en tu pausa de trabajo, es como diez mil cucharas cuando solo necesitas un cuchillo, es conocer a la persona de tus sueños y luego conocer su hermosa vida con su pareja. ¿Es irónico, no? Un poco demasiado irónico diría.
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